Desde hace tiempo se dice que las
raíces son imprescindibles para saber de donde veninos y hacia donde vamos.
Sin un conocimiento de los ingredientes
que componen la cubanía es imposible defender los principios y las costumbres,
modos de hacer, vestir comer o bailar heredadas de nuestros ancestros sobre
todo en el momento actual donde Cuba se abre al mundo.
Los moradores originarios de la playa
azul: Varadero, luchan por mantener su cubanía en un polo turístico donde la
diversidad y mezcla de culturas absorbe y entroniza criterios favorables a la
seudo cultura. “A toda Cuba le gusta” es un proyecto comunitario que tiene más
de tres lustros de fundado y muchos lauros nacionales, provinciales y en su
antiguo municipio de origen: Varadero.
Hoy pertenecen al de Cárdenas y a pesar
de las dificultades que ocasiona la desaparición de las diferentes
instalaciones culturales que existían en la ciudad balneario y que hoy están
trasladados sus inmuebles a Cárdenas, ellos mantienen opciones de desarrollo
cultural y divertimentos sanos en el barrio.
El último sábado de mes presentan
grupos como Hispanafro, con niñas que les gusta la danza española, --y a
quienes se le entregó el premio Los corales, conistente en una concha de
Chamota realizada en Pinar del río y que se entrega anualmente por el colectivo
del barrio-- el proyecto Bulerías o el del reparto 2 de diciembre del consejo
popular de loma de Fines que se involucran junto a padres y vecinos en la
comunidad que atiende la delegada del poder popular Ivón
Cervantes, una promotora cultural natural que mucho hace por elevar la cubanía
y cultura de su comunidad.
Enhorabuena por estos promotores de
barrio. Muy bien por su perspicacia.
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